El gobierno de Nepal ha lanzado una nueva medida con la intención de racionalizar la actividad en el Everest. Con el doble ánimo de evitar polémicas por falsas cimas y de favorecer eventuales tareas de localización y rescate de víctimas de accidentes en montaña, las autoridades planean obligar a los alpinistas a llevar un localizador GPS durante el transcurso de su expedición.
Prueba piloto
Esta misma primavera, se llevará a cabo una prueba piloto con un reducido grupo de alpinistas de entre los centenares que tienen previsto intentar el Everest en esta estación. Será un test para comprobar la eficacia de los dispositivos y su idoneidad para el medio.
En declaraciones a la prensa regional, el responsable del departamento de turismo de Nepal, Durga Dutta Dhakal, ha informado de que cada uno de los dispositivos de localización utilizados tiene un coste de unos 300 dólares. También ha señalado que sería de gran ayuda para localizar a alpinistas en situaciones de emergencia y poder prestar ayuda en montaña de forma más rápida y precisa.
El sistema tendrá igualmente controlados los movimientos de todos los alpinistas en la montaña. De este modo, las autoridades de Nepal pretenden evitar falsas cimas, puesto que será requisito indispensable para recibir un certificado de cumbre el presentar el dispositivo con los datos de la cima registrados.
A nadie escapa que los requisitos actuales para solicitar un certificado de cumbre (fotografía de cima y el testimonio de la agencia, guías y compañeros de expedición) es inoperante a día de hoy. El gobierno nepalí se ha tomado muy mal la noticia que ha dado la vuelta al mundo sobre una pareja de policías indios que recibió el certificado de cumbre del Everest el año pasado con una fotografía trucada y sin haber pasado del C2. Fuente: Desnivel [ver el artículo completo]